Opinión - David Aracil: "A otro perro con ese hueso"

Hace un par de semanas en esta misma tribuna leía con bastante asombro y no voy a ocultarlo, también esbozando una sonrisa a medida que avanzaba en el escrito, un artículo que se situaba entre el esperpento y la astracanada más absurda; eso sí, salvando las diferencias existentes entre los ilustres Valle-Inclán, Muñoz Seca y D. César Vilar, autor del texto.

Sant Joan cuenta desde el pasado 2 de marzo con un lugar de esparcimiento para perros, que está acotado y debidamente señalizado, con servicio de limpieza diaria, unas normas bien visibles para todos los usuarios que acceden, y que ha supuesto la rehabilitación de una zona verde más para el municipio, que estaba degradada y abandonada a su suerte desde hacía más de 15 años.

El Parque Canino era uno de los compromisos del Partido Popular en las pasadas elecciones municipales; ello unido a la demanda y colaboración de vecinos en el proyecto, ha contribuido a que finalmente se instalara en la zona de Belucha con un coste ínfimo ya que la parcela es de titularidad municipal, el mobiliario (bancos, fuente, papeleras, farolas…) ha sido rehabilitado y reutilizado para este emplazamiento, y todos los árboles que allí se encuentran han sido donados por particulares.

Sin ir más lejos en nuestra comarca existen otros ejemplos de espacios de este tipo en El Campello, San Vicente o la propia ciudad de Alicante, y lo más sorprendente es que en ninguno de ellos ha habido la menor crítica por parte de los representantes políticos, dado que reconocen su utilidad y responden a una demanda social. Pero Sant Joan siempre tiene que marcar la diferencia en cuanto a la crítica fácil, destructiva y como ahora verán, cínica.

Porque resulta que hay un gran listado de municipios donde ese partido garante del medio ambiente, aliado con los eco-pacifistas y verde que te quiero verde, Izquierda Unida, propone “Parques caninos” en sus municipios. Así es el caso por ejemplo de Benicassim, Roquetas de mar, Gijón o Toledo. En Sant Joan es el mundo al revés, porque el partido que hace bandera de estos espacios en otros lugares, aquí los desprecia denominándolos despectivamente “cagadero de perros”, e insulta la inteligencia de tantos y tantos santjoaners que habitualmente hacen un uso responsable de las instalaciones.

Resultan insólitas estas soflamas por parte de un portavoz de Izquierda Unida; pero claro, partiendo de alguien como D. César Vilar que defiende a ultranza la Educación Pública y criminaliza la Privada, pero se ha formado académicamente en centros privados; o que es capaz de defender a Cuba, Venezuela o Corea del Norte como “paraísos” donde “todo es del pueblo”, mientras él reside en la zona más elitista y cara de Sant Joan, ¿pues qué quieren que les diga? La astracanada y el esperpento son de tal calibre que producen vergüenza ajena. Para finalizar Sr. Vilar, le diré que el Parque Canino es una iniciativa que se ha realizado con la implicación de muchas personas y colectivos, como por ejemplo el “Grupo Por un Parque Canino en San Juan” entre otros, y que no tiene colores políticos, sino la firme decisión de ofrecer un servicio público más a los santjoaners.

Por ello siguiendo el patrón de la lógica y de la razón, como usted refiere en su artículo, este proyecto debería haber obtenido el respaldo de todos los representantes públicos de nuestro ayuntamiento. Es de agradecer por tanto el apoyo presencial de representantes socialistas y de Bloc-Compromís el día de la inauguración, aunque lamentablemente como suele ser la tónica habitual en todos los actos, Esquerra Unida no apareció. Visto lo visto parece que a usted Sr. Vilar y a su ego, le resulta más rentable salir en una tribuna, lanzando improperios contra todo aquel que no piensa como usted y encendiendo la mecha de su incontenible pluma. A los hechos me remito, así que a otro perro con ese hueso.

David Aracil

Secretario de Organización

Partido Popular de Sant Joan