Las Cumbres del Clima (COP): del paripé a la estafa

Artículo/Opinión. Por Vicente Rodríguez.

Desde el año 1994, la Organización para las Naciones Unidas organiza encuentros con el objetivo de buscar la colaboración internacional en la lucha contra el cambio climático. Estos encuentros se denominan conferencias del clima, conferencias de las partes o COP.

Veamos ahora lo que la Real Academia de la Lengua define como paripé y como estafa.
Paripé: Fingimiento, simulación o acto hipócrita.
Estafa: Acción de estafar
Estafar:. Pedir o sacar dinero o cosas de valor con artificios y engaños, y con ánimo de no pagar. Timar/ engañar/defraudar/ usurpar/ trampear/ sablear.

     Teniendo claro lo que significan esos términos, podemos decir a ciencia cierta, que las COP iniciaron su andadura, con toda una serie de declaraciones grandilocuentes y meras buenas intenciones. En anteriores COP se ha conseguido llegar a acuerdos. Acuerdos que si no se llegan a hacer efectivos, no son más que buenas intenciones o un ejercicio hipócrita de PARIPÉ. Tenemos como ejemplo, el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, recogido en el Protocolo de Kyoto( 1.997), o el de tomar medidas para limitar el aumento de la temperatura media del planeta a 1'5°C o no sobrepasar de ninguna manera el límite de 2°C, con referencia a los valores pre-industriales, recogido en el Acuerdo de París ( 2015).

¿Sabían estimados lectores, que las emisiones de gases de efecto invernadero, no han parado de subir desde esos acuerdos, y eso a pesar del parón que significó el covid?.¿Sabían estimados lectores, que en estos momentos, la temperatura promedio de todo el Atlántico Norte está aproximadamente 1,4ºC por encima de la media de referencia (tomada como el promedio entre los años 1982 y 2011) y además, en un año en el que la temperatura del aire en superficie (se toma la referencia de 2 metros) está en máximos históricos y seguramente en el valor más alto de los últimos 100.000 años, aproximadamente 1,72ºC por encima de la media preindustrial y por tanto dejando atrás el límite de 1,5ºC que se había propuesto en los Acuerdos de París sobre el clima?

Ahora ya lo saben, y les lanzo la siguiente pregunta ¿ Son o no son un PARIPÉ, a tenor de los resultados, todos los acuerdos adoptados en las COP, e incluso, el funcionamiento de estas conferencias?
Si, son un PARIPÉ, porque no están siendo efectivas en la lucha contra el cambio climático. Y no son efectivas, porque nunca se tomarán medidas verdaderamente efectivas, dentro de este sistema capitalista. Ya que esas efectivas medidas, irían en contra del funcionamiento intrínseco del capitalismo. Y este, prefiere morir matando, antes que asumir su culpabilidad y el fracaso de su sistema, como perpetuador de la especie.

Pero no teniendo bastante, con todo ese PARIPÉ con que nos han obsequiado todos estos años. Llega la última conferencia, la COP 28, que tuvo lugar entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre en Emiratos Árabes Unidos y va y roza ya, lo que denominaríamos como ESTAFA. Y es que ya sabemos, que este sistema, carece de todo menos de vergüenza. En la COP28 han participado cientos de lobistas de los combustibles fósiles, también representantes de entidades negacionistas del cambio climático, organizaciones con un pasado de bulos y tergiversaciones que han sido acreditadas para participar de negociaciones a puertas cerradas. 

Al menos 160 representantes de organizaciones que desprecian las evidencias científicas sobre el diagnóstico y las soluciones de la crisis climática, grupos que desde hace año viene haciendo lobby a favor de la industria fósil, han tenido acceso preferente a las negociaciones, mayor al que han obtenido las comunidades indígenas, los grupos de derechos humanos y las organizaciones de justicia climática. Ha sido tal la desvergüenza, que hasta representantes de organizaciones ambientalistas, alejadas de cualquier radicalismo y siempre posicionadas a favor del sistema, han hecho declaraciones de este tipo:

"Cuando las empresas de combustibles fósiles y sus cohortes desataron su maquinaria de mentiras y engaños en las COP, no sólo le quitaron la voz a la gente, sino que también influyeron en la política climática global para garantizar que su agenda extractiva y contaminante pueda continuar sin obstáculos", ha lamentado Blessed Chidhoni, de la Campaña Mundial para Exigir Justicia Climática.
Claro ,que ya bastante desvergüenza era que el presidente de la COP28 fuera quien era. A modo de ejemplo, aquí tienen algunas declaraciones del susodicho elemento, el Sultán Al Jaber, que afirmaba que “no hay ciencia” que indique que se necesita una eliminación gradual de los combustibles fósiles para limitar el calentamiento global a 1,5°C.
Al Jaber también dijo que la eliminación gradual de los combustibles fósiles no permitiría el desarrollo sostenible “a menos que se quiera llevar al mundo nuevamente a las cuevas” (https://www.theguardian.com/environment/2023/dec/03/back-into-caves-cop28-president-dismisses-phase-out-of-fossil-fuels)

Más adelante, analizaremos las palabras de dicho elemento sobre "llevar al mundo a las cuevas". 
Por ahora, nos autoafirmamos en lo de definir las COP28 como estafa. Pues toda esa porción de gente, que vive a expensas de los combustibles fósiles, no ha acudido a la conferencia a comer palomitas y ver el espectáculo. Si no a poner traspiés y zancadillas a los posibles acuerdos. Así como cerrar y abrir negocios suculentos, relacionados con el mundo del petróleo, entre ellos y las naciones acreditadas. Oseasé, un flagrante engaño, para el espíritu de por lo que fueron creadas estas convenciones.

Y a todo esto, ¿en que ha quedado la denominada COP28?
En una declaración solemne, que dice: que los países firmantes se comprometen a hacer “una transición lejos de los combustibles fósiles en los sistemas energéticos, de manera justa, ordenada y equitativa, acelerado la acción en esta década crucial, con el fin de alcanzar la carbono neutralidad en 2050, de acuerdo con las recomendaciones científicas”. Declaración que carece de mecanismos concretos para avanzar con determinación en la lucha contra el cambio climático. Ya estamos de vueltas, con el PARIPÉ y el BLA,BLA,BLA.

-Llevar el mundo nuevamente a las cuevas

El sistema capitalista, ante la hecatombe climática, su origen y sus consecuencias, se divide en dos posturas o bandos.

Por una parte, tenemos el bando negacionista, que como su nombre indica, niega que exista un calentamiento global y que ante la avalancha de los hechos, (que confirman ese calentamiento), va modificando sus posturas hacia campos en donde lo que niega es que este calentamiento sea producto de la mano del hombre. Dichos planteamientos se rebaten fácilmente, desde que en el siglo XIX, se descubrió el poder de efecto invernadero del CO2 y desde que mediciones satélitales de las últimas décadas, identificaron isótopos del carbono en la atmósfera, que solo pueden provenir de la quema de combustibles fósiles, así como identificaron su progresivo aumento en dicha atmósfera.

Por otra parte, tenemos el bando del" Green New Deal"( nuevo pacto verde), que asume que existe un calentamiento global y que este es producto de la quema de combustibles fósiles. Y que como, perfectos capitalistas, ante la problemática, ve un nicho importante de negocio, que pretende explotar y con el que cree que solucionará el problema ( implantación masiva de energías alternativas y limpias, extensión de movilidad eléctrica, etc.). Lo que no nos dicen y se guardan para ellos, es que las energías alternativas nunca llegarán a producir, por impedimento físico, el equivalente de gasto energético que consumimos actualmente y que no existen suficientes materiales para desarrollar una electrificación a escala mundial o que existen procesos productivos imposibles de electrificar( altos hornos, producción de cemento,etc.).

Ambos bandos pues, desde distintas posiciones de partida, nos llevarán a una misma meta.
Esa meta, que se puede resumir en las palabras del Sultán Al Jaber: " ...llevar nuevamente al mundo a las cuevas".

Y créanme estimados lectores, que esa opción quizás sea demasiado optimista, porque conforme pasan los años, cada vez nos vamos acercando más a la posibilidad de una verdadera crisis existencial de la humanidad.
Ustedes se preguntarán,como es que vamos a terminar en esa misma meta. Sencillamente, en la actualidad, no existe una correlación de fuerzas a favor del bando revolucionario popular, que pueda imprimir un cambio de rumbo en la trayectoria mundial, que nos de ciertas posibilidades de triunfo en la supervivencia del género humano. Por lo tanto, mientras no se dé, ese cambio de correlación de fuerzas, nos vemos abocados directamente al precipicio, ya que un crecimiento ilimitado es imposible en un planeta finito.
Y esa finitud, no está a décadas vista. Esa finitud está ya aquí.

Tenemos que tener una visión global de la situación y no pensar que el único problema al que nos enfrentamos es el cambio climático. Vivimos una coyuntura de policrisis, en donde al cambio climático, se le suma el agotamiento de los combustibles fósiles, la masiva extinción de las especies, el agotamiento de materiales, la contaminación por microplásticos ( que ya veremos a donde nos va a llevar), etc.

Unos grandes retos, que bajo la dirección del sistema capitalista, no vamos a enfrentar con éxito y que van a llevar al propio sistema a su colapso. Y que de hecho, del cual, ya estamos dando los primeros pasos.